28 nov 2017

¿El Ctalamochita una 'autopista' hídrica?



El Diario de Villa María (28/11/2017)
El Ctalamochita, entre las opciones para hacer una 'autopista' hídrica

El secretario de Recursos Hídricos de la Nación habló con medios nacionales sobre el proyecto que es analizado por holandeses y aseguró que éstos creen que “es viable”. Los ríos Tercero, Carcarañá, Salado y Paraná aparecen como los posibles involucrados en la megaobra
Cuesta imaginarse que por donde hoy pasan kayaks o veleros podamos ver barcazas llevando la producción agrícola hacia un puerto. Ni hablar de que convivan los “chapuzones” de cada día caluroso con las embarcaciones trabajando al servicio de los negocios internacionales.
Aunque a muchos de nosotros -villamarienses- nos parezca una locura que el río se use para otra cosa que no sea el disfrute de miles de personas que acuden a sus aguas, a su costa, a su tranquilidad; para el Gobierno nacional parece sonar como una de las posibilidades de montar una hidrovía como alternativa a la del Paraná.
Medios nacionales dieron a conocer un acuerdo firmado entre el Estado argentino y el Ministerio de Infraestructura y Gestión Hídrica de los Países Bajos (Holanda), para la realización de un estudio que analice la factibilidad de la “autopista” hídrica que sirva para sacar la producción del centro del país (y parte de otras zonas) hacia el Atlántico.
El secretario de Recursos Hídricos de la Nación, Pablo Bericiartua, dijo al diario La Voz que “tenemos varias trazas que hubo en el pasado como ideas” para montar el canal. Todos los proyectos antiguos incluyen al río Tercero o Ctalamochita como una de las cuencas más viables, ya que es la de mayor caudal de la provincia y atraviesa zonas productivas claves.
En síntesis, lo que se busca es transportar la producción mediante un medio que no sean camiones, aprovechando los caudales existentes o bien montando canales paralelos totalmente artificiales para llegar a un puerto como el de Bahía Blanca.
“Esas son precisamente las definiciones que tomaremos a partir del estudio. En la historia han habido de las dos propuestas, tanto de utilizar trazas de ríos como de no utilizarlas”, comentó el funcionario nacional.
“Los equipos que han venido de Holanda, a priori, están entusiasmados y piensan que es muy viable un proyecto de este tipo. El puerto de Rotterdam que es muy importante, tiene varias hidrovías mediterráneas”, expresó el secretario de Recursos Hídricos días atrás.

¿Cómo sería?
El estudio encargado por el Gobierno argentino costaría unos 45 mil euros para nuestro país, mientras que los holandeses invertirían 150 mil euros para estudiar si realmente es posible llevar a cabo el proyecto.
Pablo Bericiartua brindó algunos detalles sobre lo que imaginan hasta el momento los funcionarios: “Tendría muelles laterales asociados a puntos estratégicos multimodales. El ferrocarril Belgrano Cargas se está renovando, pero su impacto es en la zona norte del país. Hay una parte importante que no cubre, diría que a partir del norte de Córdoba, hasta el sur de la provincia de Buenos Aires. La traza de la que hablamos podría cubrir esta área”.
También detalló que “se van a considerar los puertos actuales como Bahía Blanca y Quequén y un área cerca de Quequén, que ya fue estudiada como posible puerto de aguas profundas, para que un barco de 60 pies (un transatlántico), pueda funcionar en ese puerto. Actualmente, tenemos la hidrovía del Paraná, la más importante del país, pero los grandes barcos no salen con toda la carga, sino que la completan en Brasil”.
Consultado sobre la complejidad de la obra, el secretario de Recursos Hídricos de la Nación dijo que “las excavaciones no son muy complejas ni muy profundas, se pueden impermeabilizar estructuras simples, pero sí hay que resolver el cruce de los cauces de los ríos con puentes canales. Básicamente, los factores por analizar son el factor negocios, el factor ambiental/cambio climático, y el factor de desarrollo estratégico”.

Los antecedentes – Estuvo en la mira de varios especialistas
En el repaso de los proyectos que existieron y que tuvieron fines similares al que plantea hoy el Gobierno nacional, aparece el de un arquitecto ya fallecido de Río Tercero, Hugo Taravella, quien incluso fue funcionario municipal e intentó por distintas vías llevar adelante su iniciativa.
En 2013, el Departamento de Hidrología de la Escuela de Ingeniería Civil de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) también profundizó en el tema y llegó a presentar un estudio para el “aprovechamiento de los ríos Tercero y Carcarañá como vías fluviales navegables”.
Desde un pueblo de la provincia de Santa Fe llamado Aarón Castellano, de recurrentes inundaciones y crecidas, un exintendente llegó a plantearle a la Nación la idea de un canal que tenga origen en San Luis y pase por el sur de Córdoba hasta llegar al río Salado en Buenos Aires.
El antecedente más reciente tiene al Colegio de Ingenieros Civiles de Córdoba como protagonista, desde donde decidieron reimpulsar un proyecto diseñado en la década de 1990 por la Escuela de Ingeniería Civil de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), que proponía crear un canal navegable, aunque no sobre un cauce natural, sino sobre uno artificial montado para tal fin.
Tenía previsto partir en dirección norte-sur desde Arroyito, pasando por Bell Ville hasta el extremo con La Pampa, teniendo a Buenos Aires como destino final.

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