3 feb 2015

Carreros "corren" un basural por la presencia policial



La Voz del Interior (03/02/2015)
Vigilado, un basural se corrió unos metros

Está sobre terrenos baldíos de calle Garibaldi. Pusieron presencia policial permanente, y ahora los carreros tiran la basura en un lote que está al frente. La Municipalidad ya probó de todo y lo adjudica a un problema social. Se expropió y proyectan espacios verdes.
El basural que está sobre calle Garibaldi, en barrio Pueyrredón, de la ciudad de Córdoba, es un símbolo de la problemática de la higiene urbana en varios barrios de esta Capital.
Ante los reclamos de los vecinos y los fracasos de las medidas tomadas durante años para erradicarlo, el municipio decidió instalar, hace un tiempo, un puesto de vigilancia policial permanente.
La respuesta de la “realidad” local no se hizo esperar: ahora los carreros tiran la basura que retiran de las casas de los vecinos del sector en el terreno de en frente, a 50 metros de donde está el contenedor-oficina que alberga al policía.
Alfredo Soletti, director de Higiene Urbana de la Municipalidad de Córdoba, admitió el inconveniente y explicó: “La vigilancia policial que instalamos permitió mantener limpia la parcela más grande, pero es cierto que ahora tiran los residuos en el terreno de en frente, y es entendible que los policías no pueden enfrentarse con los carreros porque se generaría un problema social”.
En consecuencia, los vecinos del sector y los automovilistas que pasan por las calles Garibaldi y Garay siguen padeciendo con ese basural, como ocurre desde hace años.
Para Soletti, se trata de “un problema social que involucra no sólo a los carreros sino, también, a los vecinos de esa zona de la ciudad que entregan sus residuos al sistema informal” de los carreros. “Hemos hecho de todo para cambiar esa situación, pero no hay forma de solucionarlo si los vecinos no cambian de conducta”, dijo Soletti.
Durante la gestión de Luis Juez, con la creación de Crese, y con el fin de eludir problemas con los carreros, se permitió que estos depositaran allí los residuos. La “solución” fue llevar una pala mecánica y camiones de Crese cada semana para trasladar la mugre desde allí hasta la disposición final.
Más tarde, Daniel Giacomino lanzó un programa de erradicación de basurales con una inversión de 9 millones de pesos. Se alambró el predio, pero el tejido perimetral duró menos de un mes: primero fue perforado, luego derribado y, finalmente, robado. Sin barreras, la basura volvió a llenar el terreno. Ahora la vigilancia policial logró “correr” la mugre unos metros.

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Hay casi un centenar de estos sitios en la ciudad

Se trata de basurales a cielo abierto que concentran los residuos que vecinos y Pyme entregan a carreros.
Fuentes de la propia Municipalidad de Córdoba y de investigadores de la problemática de la higiene urbana coinciden en que la problemática del histórico basural de calle Garibaldi, en barrio Pueyrredón, se repite, con matices, en más de 90 sitios baldíos de la ciudad.
La cifras varían entre los 90 y los 100 basurales porque algunos suelen ser limpiados semanal o mensualmente.
Son parte del denominado “sistema informal” de manejo de residuos que, por lo general, involucra a los mismos actores: vecinos que generan residuos de poda o de materiales de construcción; pequeñas y medianas empresas formales o informarles que producen desechos; y carreros que ofrecen el servicio de traslado de estos materiales. Los dos primeros actores buscan ahorrar, al margen de los que establecen las ordenanzas, el costo que requiere contratar un contenedor. Los carreros hacen lo que consideran su trabajo sin atender a las normas de convivencia.
Con el objetivo de modificar estas conductas, en las próximas semanas el Concejo Deliberante de la ciudad de Córdoba comenzará a debatir el proyecto de Código de Convivencia, que establece importantes multas y sanciones para este tipo de comportamiento.

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