23 jun 2014

Colonia Caroya impulsa la separación con sus niños

Diario El Despertador de Jesús María (23/06/2014)
Niños de Colonia Caroya impulsan la separación de residuos

En su escuela comenzaron con el proyecto de diferenciación de basura y pretenden extenderlo al barrio. Los alumnos de Cuarto Grado del Centro Educativo República de Italia coparon los proyectos de la institución en su 20º Aniversario.
Además de haber preparado la Bandera que desplegaron en la víspera del 20 de junio, están trabajando en un proyecto de separación de residuos.
La idea surgió cuando Esther Cortés, la portera recientemente jubilada del colegio, debió dejar su cargo.
Los chicos, para ayudar en la limpieza del predio, dedicaron una jornada a levantar toda la basura que estaba en el patio y se dieron cuenta de la necesidad de diferenciar los residuos.
La idea de una Asociación Ecológica se puso en marcha allí mismo.
Los niños comenzaron a sumar conocimientos sobre la contaminación, la disposición final, las ventajas del reciclado, entre otros conceptos teóricos.
“Como la portera se jubiló, nosotros decidimos ayudar a la otra portera levantando basura y encontramos que, a pesar de haber tachos, los chicos tiran los papeles en el patio”, explicaron.
Le plantearon la iniciativa al Departamento de Desarrollo Rural y Ambiente de la Municipalidad y surgió como modelo para extenderlo al B° República de Italia.
Para eso, han dispuesto hacer unas 200 encuestas a los frentistas de las manzanas adyacentes a la escuela, para conocer qué opinan de la recolección de residuos que hace la Municipalidad, qué sugieren para mejorar el servicio, si saben dónde se deposita lo que levantan y si estarían dispuestos a realizar separación domiciliaria.

Que sea el impulso
Para comenzar a desarrollar el proyecto, los alumnos crearon la Asociación Ecológica, con el objetivo de actuar cuando la necesidad de limpieza lo requiera.
Cada semana, los chicos se turnan y limpian el patio.
Los residuos terminan en los tachos que los alumnos y los papás han pintado de diferentes colores para diferenciar los residuos.
El verde es para el vidrio; el rojo para los plásticos; en el marrón va lo orgánico; los papeles y el cartón se depositan en el azul; en el amarillo va el metal; y en el naranja van las pilas y baterías.
Quienes coordinan el proyecto son la “seños” Susana Calderón y Claudia Moyano. Saben que los resultados se verán rápidamente en la escuela y demandará mucho más tiempo en la ciudad.
“Es el comienzo como modelo de manera paralela con la Municipalidad; luego que realicemos la concientización con los padres, lo llevaremos al barrio y luego a la ciudad; más que orgullo de ser iniciadores de la propuesta, es un objetivo a cumplir, es cooperativismo”, indicó Claudia Moyano.
No es el primer establecimiento educativo que trabaja en la separación de residuos, pero hasta ahora todos los proyectos no pudieron extenderse más allá de los límites de la institución donde nacieron.
La Municipalidad anunció en reiteradas oportunidades la posibilidad de implementar la diferenciación en forma progresiva en los barrios, pero tampoco avanzó

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