28 ago 2013
CEO de Monsanto defiende la planta en Malvinas
10:14 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (28/08/2013)
Presidente mundial de Monsanto defendió la planta en Malvinas
Aseguró que la empresa se siente acompañada por la comunidad y destacó el apoyo de la Argentina a la soja Intacta. Walter Giannoni, enviado especial a Saint Louis (Missouri, Estados Unidos).
El presidente y CEO mundial de Monsanto, Brett Begemann, defendió la construcción de una planta para la producción de maíz híbrido en Malvinas Argentinas, aseguró que la empresa “se siente acompañada” por esta población ubicada a la salida de Córdoba, sobre la ruta 19, y pidió que las regulaciones se realicen sobre la base “de la ciencia y no de la política”.
El máximo ejecutivo de la compañía que opera en el mundo de la biotecnología asumió en primera persona el uso de alimentos genéticamente modificados –“pronto los va a consumir mi nieto de 6 meses”, dijo– y agradeció el apoyo de productores y del sector público de la Argentina para convalidar el uso de la semilla de soja Intacta y llevarla a China.
Begemann y el staff de conducción de Monsanto contestaron preguntas de unos 50 periodistas convocados para tratar temas no necesariamente agropecuarios. En una extensa conferencia de prensa, el CEO mundial respondió preguntas sobre cuestiones ambientales y de mercado, ante medios de comunicación de Sudamérica, Europa, Asia y África.
En ese marco, Kerry Preete, vicepresidente de estrategia global, consideró que puede haber en el futuro “oscilaciones en el precio de la soja”, entre otras razones porque se han añadido 40 millones de hectáreas a la producción mundial, pero de igual modo serán insuficientes para atender la demanda global.
Los tres medios argentinos que participaron de la conferencia invitados por la empresa, entre ellos La Voz del Interior , acordaron preguntar a Begemann por la resistencia que genera la instalación de una planta para la producción de maíz en Córdoba y también por las condiciones de comercialización de la nueva soja Intacta RR2Pro en el país. “No tengo problemas en aceptar el debate sobre biotecnología, pero denle al cultivador la alternativa a la agricultura tradicional”, enfatizó al ser consultado por casos de rechazo a la utilización de transgénicos en Francia, España, Indonesia y la Argentina.
“Basarse en la ciencia”
Cuando se le preguntó por las protestas focalizadas en el semillero en Malvinas Argentinas, Begemann dijo que hay “un grupo, al que considero que es necesario, que muestra su oposición al proyecto. Es un grupo minúsculo, pero que hizo mucho ruido. Igual, la comunidad nos acompaña, hay que basarse en la ciencia”, fue su corta respuesta. “No tengo ningún tipo de reserva acerca de los alimentos genéticamente modificados, ni para mí ni para mi familia. Incluso tengo un nieto de 6 meses y les prometo que dentro de poco empezará a incorporar a su dieta estos alimentos. La ciencia nos respalda, porque se trata de productos que han sido testeados mucho más que cualquier otro producto agrícola”, describió.
Monsanto ejecuta obras civiles para la construcción de la planta de semillas en las afueras de Córdoba. A un costo de 1.500 millones de pesos, la primera etapa de la inversión podría quedar terminada en tres meses. Incluso, aquí no se descartó un viaje de Begemann a la Argentina para esa fecha.
Los trabajos se llevan a cabo después de que un fallo judicial rechazó un amparo interpuesto para paralizar la obra. Sin embargo, la planta no podrá comenzar a producir hasta que esté concluido el estudio de impacto ambiental bajo análisis en la Secretaría de Ambiente de la Provincia. “Es un expediente vivo, estamos en un ida y vuelta permanente de consultas”, dijo una fuente argentina de la empresa.
Tanto el presidente como otros altos directivos de Monsanto destacaron la convalidación que en la Argentina registra el uso de transgénicos por parte de los productores y del propio Gobierno, que ha reconocido los derechos sobre las patentes. En ese marco, Begemann expresó: “Agradezco y estoy orgulloso porque Argentina, Paraguay y Estados Unidos, hayan ayudado a llevar Intacta a China”.
Para los directivos, las regulaciones que aplica la Argentina no son un obstáculo tan importante como “los desafíos político y financiero. Tenemos que ser creativos para adaptar nuestro negocio al país y restringir el riesgo”, dijo.
Ver Noticia On Line
Más Información:
Hoy Día (28/08/2013)
- Nuevas protestas de los vecinos de Bouwer y Malvinas Argentinas
El Diario de Villa Carlos Paz - Edición Electrónica (28/08/2013)
- Vecinos de Malvinas bloquearon el acceso a la planta Monsanto
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Presidente mundial de Monsanto defendió la planta en Malvinas
Aseguró que la empresa se siente acompañada por la comunidad y destacó el apoyo de la Argentina a la soja Intacta. Walter Giannoni, enviado especial a Saint Louis (Missouri, Estados Unidos).
El presidente y CEO mundial de Monsanto, Brett Begemann, defendió la construcción de una planta para la producción de maíz híbrido en Malvinas Argentinas, aseguró que la empresa “se siente acompañada” por esta población ubicada a la salida de Córdoba, sobre la ruta 19, y pidió que las regulaciones se realicen sobre la base “de la ciencia y no de la política”.
El máximo ejecutivo de la compañía que opera en el mundo de la biotecnología asumió en primera persona el uso de alimentos genéticamente modificados –“pronto los va a consumir mi nieto de 6 meses”, dijo– y agradeció el apoyo de productores y del sector público de la Argentina para convalidar el uso de la semilla de soja Intacta y llevarla a China.
Begemann y el staff de conducción de Monsanto contestaron preguntas de unos 50 periodistas convocados para tratar temas no necesariamente agropecuarios. En una extensa conferencia de prensa, el CEO mundial respondió preguntas sobre cuestiones ambientales y de mercado, ante medios de comunicación de Sudamérica, Europa, Asia y África.
En ese marco, Kerry Preete, vicepresidente de estrategia global, consideró que puede haber en el futuro “oscilaciones en el precio de la soja”, entre otras razones porque se han añadido 40 millones de hectáreas a la producción mundial, pero de igual modo serán insuficientes para atender la demanda global.
Los tres medios argentinos que participaron de la conferencia invitados por la empresa, entre ellos La Voz del Interior , acordaron preguntar a Begemann por la resistencia que genera la instalación de una planta para la producción de maíz en Córdoba y también por las condiciones de comercialización de la nueva soja Intacta RR2Pro en el país. “No tengo problemas en aceptar el debate sobre biotecnología, pero denle al cultivador la alternativa a la agricultura tradicional”, enfatizó al ser consultado por casos de rechazo a la utilización de transgénicos en Francia, España, Indonesia y la Argentina.
“Basarse en la ciencia”
Cuando se le preguntó por las protestas focalizadas en el semillero en Malvinas Argentinas, Begemann dijo que hay “un grupo, al que considero que es necesario, que muestra su oposición al proyecto. Es un grupo minúsculo, pero que hizo mucho ruido. Igual, la comunidad nos acompaña, hay que basarse en la ciencia”, fue su corta respuesta. “No tengo ningún tipo de reserva acerca de los alimentos genéticamente modificados, ni para mí ni para mi familia. Incluso tengo un nieto de 6 meses y les prometo que dentro de poco empezará a incorporar a su dieta estos alimentos. La ciencia nos respalda, porque se trata de productos que han sido testeados mucho más que cualquier otro producto agrícola”, describió.
Monsanto ejecuta obras civiles para la construcción de la planta de semillas en las afueras de Córdoba. A un costo de 1.500 millones de pesos, la primera etapa de la inversión podría quedar terminada en tres meses. Incluso, aquí no se descartó un viaje de Begemann a la Argentina para esa fecha.
Los trabajos se llevan a cabo después de que un fallo judicial rechazó un amparo interpuesto para paralizar la obra. Sin embargo, la planta no podrá comenzar a producir hasta que esté concluido el estudio de impacto ambiental bajo análisis en la Secretaría de Ambiente de la Provincia. “Es un expediente vivo, estamos en un ida y vuelta permanente de consultas”, dijo una fuente argentina de la empresa.
Tanto el presidente como otros altos directivos de Monsanto destacaron la convalidación que en la Argentina registra el uso de transgénicos por parte de los productores y del propio Gobierno, que ha reconocido los derechos sobre las patentes. En ese marco, Begemann expresó: “Agradezco y estoy orgulloso porque Argentina, Paraguay y Estados Unidos, hayan ayudado a llevar Intacta a China”.
Para los directivos, las regulaciones que aplica la Argentina no son un obstáculo tan importante como “los desafíos político y financiero. Tenemos que ser creativos para adaptar nuestro negocio al país y restringir el riesgo”, dijo.
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