14 jul 2012

Cerealeras: Huinca está firme por la contaminación

El Puntal de Río Cuarto (14/07/2012)
Huinca Renancó: advierten que irán a la Justicia por las emanaciones de las cerealeras

En los últimos días, habitantes denunciaron que de las plantas se desprenden polvillo y cascarillas rojas que caen en sus casas y en los tanques de agua. Dicen que esta situación les está afectando la salud
Huinca Renancó.- Una vez más, vecinos de esta ciudad manifestaron su malestar por la presencia de partículas de polvo que se desprenden de cerealeras y advirtieron que de no haber soluciones están dispuestos a recurrir a la Justicia.
En un informe realizado por Hr Noticias de esta ciudad, varios vecinos brindaron su testimonio sobre la “situación terrible” que les toca padecer al vivir cerca de un lugar donde reciben a menudo descargas de partículas de cereal. Aseguraron que su salud se ve afectada y pidieron soluciones urgentes. "Si no las hay, no me va a quedar otra que recurrir a la Justicia", señaló una vecina.
La familia Bertola se comunicó con este medio para hacer pública lo que considera una situación que la afecta directamente, así como también a vecinos del sector, ya que sus casas están a pocos metros de una de las plantas de silos ubicadas dentro del ejido urbano de Huinca Renancó. Estos vecinos aseguran que se ven afectados por las continuas emisiones de partículas de cereal que caen sobre sus casas, la ropa, los tanques de agua y la piel.
"Esto es terrible, ayer limpiamos el tanque y sacamos jarras de estas cascarillas", contó la mujer, mostrando un recipiente donde se pueden ver restos de cereal de color rojo. Prosiguió: "Esto lo tenemos en la ropa, el agua, en la piel, ya no podemos resistir más. Queremos que nos den una solución".
En cuanto a las consecuencias que sufren por esta situación, mencionó el caso de uno de sus hijos que es asmático y que cada vez que cae esta cascarilla debe irse de su lugar de trabajo porque no lo soporta. “Yo misma he tenido una reacción alérgica en la vista. Quisiera que vinieran un día aquí para ver lo que se siente", relató la vecina y agregó: "Lo más preocupante es que esto tiene químicos y no sólo afecta a los vecinos del lugar, sino a cualquiera que pasa por acá; estamos expuestos a estas enfermedades".
La mujer aclaró que muchas de las viviendas que están en ese sector estaban antes de que se construyeran los silos.

Afecciones
Marta Aiassa tiene su casa a 100 metros de una de las plantas de silos y padece la misma situación que la familia Bertola.
“Acá, cuando empiezan a volar esas partículas por el aire, es imposible salir. Vivo con los ojos llenos de lágrimas. Ni siquiera se puede tender la ropa; realmente es terrible y necesitamos que alguien haga algo”, explicó la mujer que también convive hace años con esta problemática.
Por su parte, Ana Bertola señaló que se sienten en un estado de indefensión por parte de quienes deben controlar o denunciar esta situación. "Si el Municipio no tiene gente capacitada para solucionar este problema que no viene de ahora, que traigan a otros profesionales. Si no nos dan una solución urgente, no va a quedar otra que recurrir a la Justicia", aseveró Bertola.

Las normativas vigentes
En el territorio provincial, la ley que regula el trabajo de plantas de silos rurales y urbanas es la Nº 9855, que fue sancionada en el año 2010 por la Legislatura.
El organismo de aplicación es la Secretaría de Ambiente de la Provincia y en su artículo 4º indica: “Son objetivos de la presente ley: a) Prevenir la contaminación ambiental de la atmósfera a través del control de las emisiones de material articulado proveniente de la actividad de almacenamiento, clasificación, acondicionamiento y conservación de granos”.
En cuanto a las funciones y atribuciones, se mencionan: “Supervisar o intervenir de oficio o por denuncias en los procedimientos que fuera necesario; efectuar las evaluaciones ambientales necesarias para corroborar los datos de seguimiento, control, monitoreo y todos los aspectos relacionados con los establecimientos dedicados a la actividad de almacenamiento, clasificación, acondicionamiento y conservación de granos”.
La ley general de ambiente (ley nacional Nº 25675) establece una serie de principios, entre los que se destaca el precautorio. Dicha norma, en su artículo 4º, afirma: “Las causas y las fuentes de los problemas ambientales se atenderán en forma prioritaria e integrada, tratando de prevenir los efectos negativos que sobre el ambiente se pueden producir”.

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