21 dic 2010

Ex aceitera: se declaró incompetente el Juez

El Puntal de Río Cuarto (21/12/2010)
Ex aceitera: 10 meses después, la Justicia de la Provincia se declaró incompetente

Muñoz, juez de Control, definió que la causa deberá volver al fuero federal, que ya la había rechazado. Ahora podría terminar todo en la Corte Suprema
La Justicia provincial se tomó diez meses para decidir que, finalmente, no es competente en la causa penal por la contaminación ambiental en la ex oleaginosa Río Cuarto. En ese tiempo pasaron dos fiscales, hubo una imputación al empresario Leonardo Passarini y hasta se generó una pelea política entre el gobierno municipal y el encargado de la investigación, Walter Guzmán, por la supuesta inacción a la hora de tomar medidas para remediar las posibles consecuencias de la presencia de amianto.
Pero el jueves, el juez de Control, Daniel Muñoz, le comunicó a los abogados del Municipio que había aceptado el recurso presentado por los abogados de Passarini, que alegaron que los casos de contaminación ambiental deben ser dirimidos en la Justicia Federal.
La decisión, que llega diez meses después de que la Municipalidad presentara la denuncia original, puede poner a la causa en punto muerto durante años.
El 17 de febrero de este año, la Municipalidad denunció penalmente a Passarini y pidió que se lo condenara a prisión por contaminar con residuos peligrosos la zona de la ex oleaginosa. Los abogados oficiales le reprochan no haber hecho nada para eliminar la presencia de amianto, un cancerígeno probado.
Pero el juez federal Carlos Ochoa entendió que la causa debía ser investigada en la Justicia Provincial a pesar de que el artículo 58 de la ley de residuos peligrosos dice lo contrario. Es que el magistrado aplicó el criterio aceptado de que deben estar afectados al menos dos distritos para que la causa se asiente en el fuero federal. Pocos meses después, en abril, cuando el caos ya estaba en los tribunales ordinarios, el fiscal Julio Rivero imputó a Passarini por los efectos contaminantes “gravemente nocivos” que la ex aceitera estaba generando en el sur.
Por una jugada judicial, la causa salió de las manos de Rivero terminó en la fiscalía de Guzmán. Desde entonces, poco y nada ha pasado. El nuevo jefe de la investigación se tomó más de seis meses para elegir qué organismo especializado iba a analizar si había o no contaminación en el predio. En los últimos meses, el gobierno acusó a Guzmán de negligente y planteó que no hacía nada por resguardar la salud de la población.
Ahora, ante un recurso del abogado de Passarini, la Justicia provincial dio un nuevo volantazo y le devolvió el caso a Ochoa. Si el juez federal mantiene su postura de que el caso no le corresponde, entonces, será la Corte Suprema la que deberá dirimir quién deberá hacerse cargo de la investigación. Ese camino llevaría varios años.
La Municipalidad ya le pidió a Ochoa que se avoque a la causa y que defina medidas urgentes para evitar daños para los vecinos. “Esto no es una cuestión personal. Estamos hablando del interés general de la comunidad. Es una vergüenza la historia que ha seguido este expediente. Lo iniciamos en febrero y hasta hoy no se ha tomado ninguna medida”, dijo Jorge González Schiavi, abogado del intendente.

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