27 oct 2010

A juicio por las fumigaciones en Ituzaingó

La Voz del Interior (27/10/2010)
A juicio por las fumigaciones en Ituzaingó



Rechazaron el sobreseimiento de los tres imputados. Se los acusade violar la Ley de Agroquímicos.
La Cámara de Acusación de la ciudad de Córdoba elevó a juicio la causa de contaminación por fumigación clandestina con plaguicidas en barrio Ituzaingó Anexo, que se sigue contra dos agropecuarios y un piloto de avión.
La resolución de la Cámara se produjo luego de que el fiscal de instrucción del Distrito Judicial 3, turno 6 de la Capital, Carlos Matheu, apelara la decisión del juez de control Esteban Díaz, quien había dictado el sobreseimiento de los tres imputados.
El fallo, que revoca la resolución apelada, establece que para dictar sobreseimiento y cerrar el proceso de forma anticipada, debe haber certeza de que no hubo delito o responsabilidad penal de los imputados, y que en este caso todavía quedan dudas. “Esto es muy importante a nivel nacional, porque es la primera que se pide la elevación a juicio de dos productores agropecuarios por fumigar campos con agroquímicos”, indicó Matheu.
La causa involucra a los productores agropecuarios Jorge Alberto Gabrielli (48) y Francisco Rafael Parra (53), y al comerciante y piloto de avión, Edgardo Jorge Pancello (51), quienes habrían violado el artículo 58 de la Ley de Agroquímicos 9164.
Gabrielli y Parra fueron acusados como supuestos instigadores del delito de contaminación ambiental con endosulfán y glifosato, mientras que a Pancello se le imputa la autoría del mismo ilícito, ya que habría sido quien tuvo a su cargo la fumigación de los campos.
La norma prohíbe la aplicación aérea de ambos productos, en un radio menor a los 1.500 metros (endosulfán) y los 500 metros (glifosato) de distancia –respectivamente–, de la población urbana, por tratarse de químicos peligrosos para la salud. “En un barrio de cinco mil habitantes hay casi 200 personas con cáncer y cerca de 100 ya murieron por esa enfermedad. Estos agroquímicos son cancerígenos”, agregó el fiscal.
La causa. La causa comenzó en 2002, cuando un grupo de madres denunció que había numerosos casos de cáncer en el barrio. Luego se constató que la zona estaba contaminada con un cóctel tóxico compuesto por PCB de los transformadores de Epec, agua contaminada con plomo, cromo y arsénico y plaguicidas en los tanques domiciliarios.
Matheu cuestionó los fundamentos de Díaz, al considerar que había pruebas para un juicio.

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