12 may 2009
Piden separación de RSU en Villa María
6:34 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
El Puntal de Villa María (12/05/2009)
Piden que los vecinos empiecen a seleccionar residuos en origen
Es en el marco de la propuesta que presentaron al Concejo para optimizar la separación. “Es necesario que cada ciudadano se vea comprometido en la disposición final de los residuos que genera”, apuntaron
Los once integrantes de la Cooperativa de Trabajo 7 de Febrero, que tienen a su cargo la separación de residuos sólidos urbanos una vez que llegan a planta, esperan que finalmente 2009 sea el año en el que puedan salir a flote en lo económico.
La entidad nació hace tres años luego de que se retiró la concesión a Corbam de la planta de tratamiento. Por entonces recibieron subsidio de la Municipalidad y ahora quien les da “una mano” es EMRE, la nueva concesionaria del predio ubicado camino a Ana Zumarán. Reciben 800 pesos por mes, son 8 mujeres y 3 hombres.
La cooperativa presentó la semana pasada ante el Concejo un pedido de audiencia, acompañado por una propuesta para la actividad. La firmaron la titular de la entidad, Silvia Durán, y la secretaria Mónica Corzo.
En el escrito, las dirigentes admiten que la gestión integral de los residuos sólidos urbanos (RSU) tiene dos carencias “que imposibilitan la sustentabilidad”. Por un lado, la falta de una planificación clara y la “incompatibilidad” entre la cooperativa y la labor encomendada, incompatibilidad que nació del crecimiento de las dificultades que los acechan “desde el comienzo”.
“El porcentaje que se logre en la reducción de volúmenes generales será directamente proporcional al nivel de eficiencia de todo el sistema. 100% de recuperación=100% de eficiencia. En este sentido debemos reconocer que nuestra cooperativa hoy no cumple con su propósito y de esta manera es responsable de que todo el sistema esté fracasando. Esto es una parte de la realidad, debido a que la situación actual no ha sido promovida por nosotros. Si bien hay responsabilidad intrínseca, los principales factores por los cuales nuestra cooperativa no está trabajando debidamente son externos. Que todo el proceso carezca de un plan integral a largo plazo y que partes del sistema no sean sustentables en términos económicos son los principales factores responsables del fracaso”, apuntaron en la nota al cuerpo legislativo.
Y destacaron que eso revela “falta de experiencia o una mirada superficial al embarcarse en un proyecto tan grande y costoso sin haber involucrado a la ciudad”. A renglón seguido añadieron que como el principal “responsable en la gestión de un residuo es aquel que lo genera. Además de lógico es necesario que cada ciudadano se vea comprometido en la disposición final de los residuos que genera. Esto hace imperante establecer una campaña para comenzar a seleccionar los residuos en origen”.
También señalaron que la cooperativa no está produciendo, con lo cual sus integrantes “no trabajan y no ganan dinero”, las cavas para enterramiento “se llenan rápidamente”, y el Municipio “afronta consecuencias ambientales”.
Con este panorama, consideraron que es necesario que todos los actores involucrados en la problemática se pongan de acuerdo para trabajar en un mismo sentido. Y precisamente por esos carriles marcha el plan que presentaron con un triple objetivo: mejorar la calidad de vida de los integrantes de la 7 de Febrero, disminuir los impactos negativos asociados a la incorrecta gestión de residuos y maximizar “el beneficio social”, con el desarrollo de un “plan director para recuperar los RSU reciclables, tanto orgánicos como inorgánicos”.
“El propósito de desarrollar un Plan Director de los RSU es que la totalidad de los residuos generados en el ámbito de la ciudad sean gestionados en forma ambientalmente adecuada” y trabajando desde un enfoque multidisciplinario.
Para conseguir esas metas proponen que se trabaje en líneas de acción que propendan al mantenimiento de la mano de obra, el cumplimiento de la legislación de referencia, la capacitación del personal, el incremento en la recuperación de residuos reciclables, la incorporación de valor a los materiales reciclados, el relevamiento de potenciales clientes, la segregación de los residuos a nivel domiciliario, la elaboración de un sistema de gestión ambiental y de su sistema de gestión de calidad para las operaciones de reciclado, entre otras.
“De acuerdo a ello será necesario ordenar el manejo de los RSU de la ciudad de manera de transformar el manejo no integrado actual en una gestión integral de implementación gradual”, con ese marco a la Cooperativa 7 de Febrero le corresponderá cumplir un rol que asegure “integrar a los trabajadores informales de los RSU, reincorporar al circuito productivo recursos que de otra manera se estarían enterrando y reducir los requerimientos de terrenos necesarios para la disposición final de los RSU”, entre otros.
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Piden que los vecinos empiecen a seleccionar residuos en origen
Es en el marco de la propuesta que presentaron al Concejo para optimizar la separación. “Es necesario que cada ciudadano se vea comprometido en la disposición final de los residuos que genera”, apuntaron
Los once integrantes de la Cooperativa de Trabajo 7 de Febrero, que tienen a su cargo la separación de residuos sólidos urbanos una vez que llegan a planta, esperan que finalmente 2009 sea el año en el que puedan salir a flote en lo económico.
La entidad nació hace tres años luego de que se retiró la concesión a Corbam de la planta de tratamiento. Por entonces recibieron subsidio de la Municipalidad y ahora quien les da “una mano” es EMRE, la nueva concesionaria del predio ubicado camino a Ana Zumarán. Reciben 800 pesos por mes, son 8 mujeres y 3 hombres.
La cooperativa presentó la semana pasada ante el Concejo un pedido de audiencia, acompañado por una propuesta para la actividad. La firmaron la titular de la entidad, Silvia Durán, y la secretaria Mónica Corzo.
En el escrito, las dirigentes admiten que la gestión integral de los residuos sólidos urbanos (RSU) tiene dos carencias “que imposibilitan la sustentabilidad”. Por un lado, la falta de una planificación clara y la “incompatibilidad” entre la cooperativa y la labor encomendada, incompatibilidad que nació del crecimiento de las dificultades que los acechan “desde el comienzo”.
“El porcentaje que se logre en la reducción de volúmenes generales será directamente proporcional al nivel de eficiencia de todo el sistema. 100% de recuperación=100% de eficiencia. En este sentido debemos reconocer que nuestra cooperativa hoy no cumple con su propósito y de esta manera es responsable de que todo el sistema esté fracasando. Esto es una parte de la realidad, debido a que la situación actual no ha sido promovida por nosotros. Si bien hay responsabilidad intrínseca, los principales factores por los cuales nuestra cooperativa no está trabajando debidamente son externos. Que todo el proceso carezca de un plan integral a largo plazo y que partes del sistema no sean sustentables en términos económicos son los principales factores responsables del fracaso”, apuntaron en la nota al cuerpo legislativo.
Y destacaron que eso revela “falta de experiencia o una mirada superficial al embarcarse en un proyecto tan grande y costoso sin haber involucrado a la ciudad”. A renglón seguido añadieron que como el principal “responsable en la gestión de un residuo es aquel que lo genera. Además de lógico es necesario que cada ciudadano se vea comprometido en la disposición final de los residuos que genera. Esto hace imperante establecer una campaña para comenzar a seleccionar los residuos en origen”.
También señalaron que la cooperativa no está produciendo, con lo cual sus integrantes “no trabajan y no ganan dinero”, las cavas para enterramiento “se llenan rápidamente”, y el Municipio “afronta consecuencias ambientales”.
Con este panorama, consideraron que es necesario que todos los actores involucrados en la problemática se pongan de acuerdo para trabajar en un mismo sentido. Y precisamente por esos carriles marcha el plan que presentaron con un triple objetivo: mejorar la calidad de vida de los integrantes de la 7 de Febrero, disminuir los impactos negativos asociados a la incorrecta gestión de residuos y maximizar “el beneficio social”, con el desarrollo de un “plan director para recuperar los RSU reciclables, tanto orgánicos como inorgánicos”.
“El propósito de desarrollar un Plan Director de los RSU es que la totalidad de los residuos generados en el ámbito de la ciudad sean gestionados en forma ambientalmente adecuada” y trabajando desde un enfoque multidisciplinario.
Para conseguir esas metas proponen que se trabaje en líneas de acción que propendan al mantenimiento de la mano de obra, el cumplimiento de la legislación de referencia, la capacitación del personal, el incremento en la recuperación de residuos reciclables, la incorporación de valor a los materiales reciclados, el relevamiento de potenciales clientes, la segregación de los residuos a nivel domiciliario, la elaboración de un sistema de gestión ambiental y de su sistema de gestión de calidad para las operaciones de reciclado, entre otras.
“De acuerdo a ello será necesario ordenar el manejo de los RSU de la ciudad de manera de transformar el manejo no integrado actual en una gestión integral de implementación gradual”, con ese marco a la Cooperativa 7 de Febrero le corresponderá cumplir un rol que asegure “integrar a los trabajadores informales de los RSU, reincorporar al circuito productivo recursos que de otra manera se estarían enterrando y reducir los requerimientos de terrenos necesarios para la disposición final de los RSU”, entre otros.
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