14 dic 2007

Los hornos deben encenderse

El Puntal de Villa María (14/12/2007)
Los hornos deben encenderse para comprobar si contaminan

Desde el Municipio afirmaron que esa es la única forma de que los propietarios realicen el estudio que les exige la Agencia Córdoba Ciencia. Piden paciencia para concretar el traslado de la empresa
La única forma en que se puedan efectuar los estudios sobre emisión de gases al horno de la fundición de barrio Los Olmos es encendiéndolos para que trabajen.
Esta afirmación partió de fuentes oficiales que se encargaron de llevar tranquilidad a los vecinos indicando que en el transcurso del próximo año la fundición deberá trasladarse fuera de la ciudad.

La auditoría de Córdoba Ambiente
Tras los constantes reclamos de Fabián Druetta, residente a escasos metros de la empresa, la Agencia Córdoba Ambiente efectuó una auditoría en el lugar y encargó a la firma, propiedad de Roberto y Osvaldo Gribaudo, que se realizaran una serie de trabajos en el sector donde está asentada la fundición a fin de hacer los análisis pertinentes para comprobar si los gases que allí se emiten son tóxicos o no.
Los requerimientos que la empresa debe cumplimentar son los siguientes: efectuar mediciones de emisiones de gases, realizar mediciones del material particulado durante el funcionamiento de las máquinas, efectuar una caracterización de los residuos extraídos del horno, lo mismo que con la arena y tierra que se utiliza.
Para cumplimentar con estos requerimientos es necesaria la puesta en funcionamiento del horno, ya que de otra forma sería imposible llevar a cabo los análisis que se le han solicitado.

La fundición
El origen de la fundición data de la década del ‘80, cuando era propiedad de la familia Vocos, en ese tiempo la fundición estaba ubicada en otro punto de la ciudad y poseía la habilitación de la Municipalidad para funcionar.
Fuentes del Municipio informaron que cuando Vocos realiza la transferencia del fondo de comercio a la familia Gribaudo, éstos no hicieron los trámites para la habilitación y es por eso que sufrieron una clausura hace ya más de un año.
En este tiempo, los responsables de la firma cumplimentaron los requerimientos para la habilitación, pero con los reclamos de Druetta se comenzaron a pedir una serie de estudios de contaminación que antes no se efectuaban.
“Es por esto que hace algunas semanas se le efectúa una revocatoria de la habilitación que tenía. La firma presentó un recurso de reconsideración de esta medida que hoy lo tiene en su poder el doctor Luis Rey”, señalaron desde el Municipio local.
La misma fuente aclaró que la decisión del Departamento Ejecutivo Municipal ya está tomada y es la de trasladar la empresa hacia otro sector, lejos del ejido urbano: “El problema es que cuando la empresa se instaló en ese lugar no estaban las viviendas tal como están hoy, los propietarios poseen derechos adquiridos sobre el lugar. Además hay que tener en cuenta que hay alrededor de treinta familias que viven de eso y no podemos dejarlas en la calle”.
También aseguraron que en el transcurso del próximo año se procederá al traslado de la fundición, probablemente al predio del Parque Industrial villamariense.
Mientras tanto, y a pedido de la auditoría que llevó adelante la Agencia Córdoba Ambiente, la Fundición Gribaudo necesita volver a encender sus hornos para hacer los análisis y ponerse al día con los requisitos que se le exigieron desde la Provincia para evitar la clausura definitiva y el cese de sus trabajos para las 30 familias que viven de esos trabajos.

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