8 oct 2007
Auditorías a las químicas
1:07 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (08/10/2007)
Cómo se harán las auditorías a las químicas
Una de las principales evidencias que dejó la secuela de accidentes en las plantas químicas de Río Tercero ocurridos entre junio y agosto pasado, que tuvieron alto impacto en la sociedad local y repercusión nacional, fue la ausencia de una política de control y auditorías técnicas permanentes sobre las industrias de riesgo, para evitar tanto que contaminen como que puedan generar accidentes graves por fallas de seguridad.
A meses de los hechos, todos asumen la necesidad de generar un sistema de control periódico, pero no aparece aún definido quién y cómo se hará cargo de esa tarea.
La Agencia Córdoba Ambiente sigue ausente en esa materia. Es más: ha argumentado que no le corresponde ese rol de contralor.
La Secretaría de Ambiente de la Nación ha admitido que antes poco se hizo pero se comprometió a encarar ahora un programa de auditorías para el polo químico riotercerense.
El municipio, en tanto, desde siempre estuvo limitado para ese rol, por carencia técnica, económica y política para asumir el rol de control sobre tres empresas que facturan, cada una, bastante más que el total del presupuesto municipal.
Debieron haber dos muertos por un escape primero y una evacuación masiva improvisada por el temor ante una explosión luego, para que la situación cambiara.
Ante la urgencia, el municipio apeló a contratar a una empresa consultora privada, para hacer inspecciones a Petroquímica primero y a Fábrica Militar y Atanor luego. La salida sirvió, cuando ni Nación ni Provincia aparecían y no había respuestas a mano sobre cómo salir del atolladero. Sin embargo, una empresa privada contratada por el municipio que puede servir para la emergencia, es posible que no alcance para un plan a largo plazo, que requiere un sistema de auditorías permanentes, creíbles, oficiales y públicas.
La Secretaría de Ambiente de la Nación apareció en la escena, después de los hechos y de los reclamos, y prometió un programa en ese sentido, que está por verse.
La Agencia Córdoba Ambiente no apareció antes ni después. En los días de más necesidades de respuestas, emitió un comunicado en el que aclaraba que “sólo tiene como responsabilidad controlar el tratamiento de los residuos peligrosos generados por las empresas” y no la seguridad de las plantas industriales en sí. También la agencia oficial aseguraba que “hubo inspecciones sobre condiciones y medio ambiente en el trabajo del Cymat, dependiente Ministerio de Producción y Trabajo de Córdoba” tras los sucesos de junio y julio en Río Tercero.
Mientras, diversas fuentes ligadas al tema ambiental opinan que no es real que la Agencia Córdoba Ambiente no tenga competencia de control. “Es autoridad de aplicación, según la ley 7343, ante todo caso de contaminación del aire, suelo y agua de toda la provincia”, señalan.
Otros comparan que la Agencia Córdoba Ambiente tuvo potestad, el año pasado, para clausurar definitivamente un frigorífico municipal porque funcionaba en la zona urbana pero argumenta ahora no tener facultades para revisar si las plantas de tres empresas químicas ponen en riesgo a la población.
Residuos peligrosos, sí
En realidad, los organismos ambientales de la Nación y la Provincia en los últimos años algunas inspecciones hicieron en las industrias riotercerenses pero en materia de control sobre el destino de sus residuos peligrosos, cuestión que es de utilidad para evitar daños al ambiente, pero prácticamente nada relevaron en materia de seguridad industrial, es decir, en estrategias que prevengan escapes, derrames y sobre todo accidentes.
Ahora, inspecciones
Técnicos de Ambiente de la Nación realizaron en las últimas semanas varios relevamientos en Fábrica Militar y Atanor, en los que determinaron varios puntos que deberían corregirse. No pudieron hacerlo en Petroquímica, porque la empresa interpretó que el área nacional no tenía competencia para esas inspecciones. Tras un corto circuito entre las partes, días atrás directivos de la empresa señalaron que el tema está superado y que las inspecciones nacionales también se harán en esa planta.
Mientras, el municipio a través de la consultora que contrató, también está haciendo relevamientos sobre las tres empresas químicas.
Hacia adelante
Sin embargo, la cuestión central es cómo dar respuesta real a auditorías sostenidas en el tiempo y no sólo ante el actual estado de ebullición social.
En este marco, apareció una propuesta del gobierno municipal, formulada ante la Secretaría de Ambiente de la Nación: la creación de un equipo municipal propio, con profesionales especializados en el tema de seguridad ambiental, que se encarguen de esa tarea, bajo supervisión del área oficial nacional.
Para ello, el intendente Luis Brouwer de Koning ha solicitado a la repartición que conduce Romina Picolotti que aporte los recursos económicos y el asesoramiento técnico para la creación y sostenimiento de ese equipo municipal.
En el gobierno municipal admiten que este sistema garantizaría continuidad en los controles. “Así, no tendríamos que salir a buscar una universidad para cada relevamiento o a pedir a otros organismos que lo hagan, ver primero si pueden hacerlo, luego si tenemos los recursos. No esperaríamos a que los demás lo hagan y el equipo estaría acá más cerca del problema que cualquier otro”, acotan.
Como desventaja de la idea, admiten que le generará al gobierno municipal una mayor responsabilidad, a pesar de ser el ámbito estatal (en relación con la Nación y la Provincia) con menor poder político y económico para controlar a los grupos empresarios.
Aunque admiten que el municipio es el hilo más fácil de presionar, por empresas y por la sociedad, defienden la idea sosteniendo que a esta altura asumir ese riesgo sería menor al de tener que peregrinar una o dos veces por año para que alguien haga esa tarea.
Por ahora, ese proyecto espera la respuesta de la Nación.
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Picolotti espera a Córdoba Ambiente
En su visita reciente a Río Tercero, Romina Picolotti contestó a este diario sobre la ausencia de las áreas ambientales de la Nación y la Provincia en controles a las industrias químicas locales antes de que ocurrieran los sucesos conocidos.
–¿No cree que se podrían haber evitado llegar a esta situación si la Secretaría de Ambiente hubiese hecho controles al polo químico antes?, ¿no estuvieron ausentes del control?
–Uno no puede preverlo. La Secretaría de Ambiente tiene una responsabilidad que esta asumiendo ahora. La Argentina no tenía política ambiental antes, recién ahora la estamos iniciando y por eso tenemos problemas que arrastramos de hace muchos años. Si el Riachuelo estaría menos contaminado si la Secretaría hubiese intervenido antes, seguramente sí. Lo importante es que nos hacemos cargo de cuestiones que antes no se hacían cargo en esa área. Si se hubiera actuado antes seguramente hubiéramos prevenido accidentes y contaminantes hídricos que hoy son muy severos en Argentina.
–¿Cuál es su opinión respecto a la ausencia de la Agencia Córdoba Ambiente en materia de contralor en Río Tercero?
–Le hemos precisado a la Provincia de cada paso dado en todo esto y la Provincia tendrá que evaluar cómo procede. Lo óptimo es trabajar juntos, Provincia, Nación e intendencia, como un Estado solo, y creo que eso es lo que la gente está esperando. Esperemos que la Provincia se siente cuanto antes en esta mesa de trabajo.
–¿Conoce cuál es la razón por la cual todavía no se sumó?
–Desconozco la razón.
–¿Pero no está obligada a hacerlo como órgano de contralor?
–La Provincia está obligada legalmente a controlar, no tenemos conocimiento de cuáles son los pasos que ha tomado porque la notificamos pero todavía no hemos recibido respuestas por parte de la Agencia Córdoba Ambiente.
–¿No puede usted exigirle o intimarla?
–No tenemos esa facultad, es un país federal.
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Cómo se harán las auditorías a las químicas
Una de las principales evidencias que dejó la secuela de accidentes en las plantas químicas de Río Tercero ocurridos entre junio y agosto pasado, que tuvieron alto impacto en la sociedad local y repercusión nacional, fue la ausencia de una política de control y auditorías técnicas permanentes sobre las industrias de riesgo, para evitar tanto que contaminen como que puedan generar accidentes graves por fallas de seguridad.
A meses de los hechos, todos asumen la necesidad de generar un sistema de control periódico, pero no aparece aún definido quién y cómo se hará cargo de esa tarea.
La Agencia Córdoba Ambiente sigue ausente en esa materia. Es más: ha argumentado que no le corresponde ese rol de contralor.
La Secretaría de Ambiente de la Nación ha admitido que antes poco se hizo pero se comprometió a encarar ahora un programa de auditorías para el polo químico riotercerense.
El municipio, en tanto, desde siempre estuvo limitado para ese rol, por carencia técnica, económica y política para asumir el rol de control sobre tres empresas que facturan, cada una, bastante más que el total del presupuesto municipal.
Debieron haber dos muertos por un escape primero y una evacuación masiva improvisada por el temor ante una explosión luego, para que la situación cambiara.
Ante la urgencia, el municipio apeló a contratar a una empresa consultora privada, para hacer inspecciones a Petroquímica primero y a Fábrica Militar y Atanor luego. La salida sirvió, cuando ni Nación ni Provincia aparecían y no había respuestas a mano sobre cómo salir del atolladero. Sin embargo, una empresa privada contratada por el municipio que puede servir para la emergencia, es posible que no alcance para un plan a largo plazo, que requiere un sistema de auditorías permanentes, creíbles, oficiales y públicas.
La Secretaría de Ambiente de la Nación apareció en la escena, después de los hechos y de los reclamos, y prometió un programa en ese sentido, que está por verse.
La Agencia Córdoba Ambiente no apareció antes ni después. En los días de más necesidades de respuestas, emitió un comunicado en el que aclaraba que “sólo tiene como responsabilidad controlar el tratamiento de los residuos peligrosos generados por las empresas” y no la seguridad de las plantas industriales en sí. También la agencia oficial aseguraba que “hubo inspecciones sobre condiciones y medio ambiente en el trabajo del Cymat, dependiente Ministerio de Producción y Trabajo de Córdoba” tras los sucesos de junio y julio en Río Tercero.
Mientras, diversas fuentes ligadas al tema ambiental opinan que no es real que la Agencia Córdoba Ambiente no tenga competencia de control. “Es autoridad de aplicación, según la ley 7343, ante todo caso de contaminación del aire, suelo y agua de toda la provincia”, señalan.
Otros comparan que la Agencia Córdoba Ambiente tuvo potestad, el año pasado, para clausurar definitivamente un frigorífico municipal porque funcionaba en la zona urbana pero argumenta ahora no tener facultades para revisar si las plantas de tres empresas químicas ponen en riesgo a la población.
Residuos peligrosos, sí
En realidad, los organismos ambientales de la Nación y la Provincia en los últimos años algunas inspecciones hicieron en las industrias riotercerenses pero en materia de control sobre el destino de sus residuos peligrosos, cuestión que es de utilidad para evitar daños al ambiente, pero prácticamente nada relevaron en materia de seguridad industrial, es decir, en estrategias que prevengan escapes, derrames y sobre todo accidentes.
Ahora, inspecciones
Técnicos de Ambiente de la Nación realizaron en las últimas semanas varios relevamientos en Fábrica Militar y Atanor, en los que determinaron varios puntos que deberían corregirse. No pudieron hacerlo en Petroquímica, porque la empresa interpretó que el área nacional no tenía competencia para esas inspecciones. Tras un corto circuito entre las partes, días atrás directivos de la empresa señalaron que el tema está superado y que las inspecciones nacionales también se harán en esa planta.
Mientras, el municipio a través de la consultora que contrató, también está haciendo relevamientos sobre las tres empresas químicas.
Hacia adelante
Sin embargo, la cuestión central es cómo dar respuesta real a auditorías sostenidas en el tiempo y no sólo ante el actual estado de ebullición social.
En este marco, apareció una propuesta del gobierno municipal, formulada ante la Secretaría de Ambiente de la Nación: la creación de un equipo municipal propio, con profesionales especializados en el tema de seguridad ambiental, que se encarguen de esa tarea, bajo supervisión del área oficial nacional.
Para ello, el intendente Luis Brouwer de Koning ha solicitado a la repartición que conduce Romina Picolotti que aporte los recursos económicos y el asesoramiento técnico para la creación y sostenimiento de ese equipo municipal.
En el gobierno municipal admiten que este sistema garantizaría continuidad en los controles. “Así, no tendríamos que salir a buscar una universidad para cada relevamiento o a pedir a otros organismos que lo hagan, ver primero si pueden hacerlo, luego si tenemos los recursos. No esperaríamos a que los demás lo hagan y el equipo estaría acá más cerca del problema que cualquier otro”, acotan.
Como desventaja de la idea, admiten que le generará al gobierno municipal una mayor responsabilidad, a pesar de ser el ámbito estatal (en relación con la Nación y la Provincia) con menor poder político y económico para controlar a los grupos empresarios.
Aunque admiten que el municipio es el hilo más fácil de presionar, por empresas y por la sociedad, defienden la idea sosteniendo que a esta altura asumir ese riesgo sería menor al de tener que peregrinar una o dos veces por año para que alguien haga esa tarea.
Por ahora, ese proyecto espera la respuesta de la Nación.
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Picolotti espera a Córdoba Ambiente
En su visita reciente a Río Tercero, Romina Picolotti contestó a este diario sobre la ausencia de las áreas ambientales de la Nación y la Provincia en controles a las industrias químicas locales antes de que ocurrieran los sucesos conocidos.
–¿No cree que se podrían haber evitado llegar a esta situación si la Secretaría de Ambiente hubiese hecho controles al polo químico antes?, ¿no estuvieron ausentes del control?
–Uno no puede preverlo. La Secretaría de Ambiente tiene una responsabilidad que esta asumiendo ahora. La Argentina no tenía política ambiental antes, recién ahora la estamos iniciando y por eso tenemos problemas que arrastramos de hace muchos años. Si el Riachuelo estaría menos contaminado si la Secretaría hubiese intervenido antes, seguramente sí. Lo importante es que nos hacemos cargo de cuestiones que antes no se hacían cargo en esa área. Si se hubiera actuado antes seguramente hubiéramos prevenido accidentes y contaminantes hídricos que hoy son muy severos en Argentina.
–¿Cuál es su opinión respecto a la ausencia de la Agencia Córdoba Ambiente en materia de contralor en Río Tercero?
–Le hemos precisado a la Provincia de cada paso dado en todo esto y la Provincia tendrá que evaluar cómo procede. Lo óptimo es trabajar juntos, Provincia, Nación e intendencia, como un Estado solo, y creo que eso es lo que la gente está esperando. Esperemos que la Provincia se siente cuanto antes en esta mesa de trabajo.
–¿Conoce cuál es la razón por la cual todavía no se sumó?
–Desconozco la razón.
–¿Pero no está obligada a hacerlo como órgano de contralor?
–La Provincia está obligada legalmente a controlar, no tenemos conocimiento de cuáles son los pasos que ha tomado porque la notificamos pero todavía no hemos recibido respuestas por parte de la Agencia Córdoba Ambiente.
–¿No puede usted exigirle o intimarla?
–No tenemos esa facultad, es un país federal.
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