El predio del basural de Los Cóndores, en el que una empresa privada inició hace tres meses una experiencia de reciclado de residuos domiciliarios, va camino a transformarse en un centro de procesamiento de basura regional.
A los residuos que genera esa localidad de casi tres mil habitantes, se sumarán ahora los de Elena, de similar tamaño, y posiblemente pronto los que generan los 12 mil habitantes de Almafuerte.
Esta semana, el municipio de Elena confirmó que ya puso en marcha esa modalidad. “Esto es importante para el pueblo y además cumplimos con la Agencia Córdoba Ambiente porque así erradicaremos en el transcurso de este año el basural a cielo abierto”, indicó el intendente de Elena, Néstor Zunino. El camión compactador que recolecta la basura directamente la lleva ahora a Los Cóndores.
En Elena, la otra alternativa que se evaluaba era imitar a su vecina Berrotarán, que dejó de acumular residuos en su basural cuando meses atrás decidió empezar a enviarla al predio de enterramiento sanitario de Río Cuarto, que cobra 24 pesos por tonelada recibida.

La de Almafuerte
Mientras, el gobierno municipal de Almafuerte –como anticipó este diario la semana pasada– está a punto de firmar un convenio con la empresa cordobesa Resimundo, que recicla los residuos en Los Cóndores. El dato nuevo, trascendido días atrás, es que esa firma no instalaría una planta de clasificación y compactado en Almafuerte sino que recibiría los residuos que desde esta ciudad se le envíe al predio que ya ocupa en Los Cóndores.
De todos modos, entre un 30 y 40 por ciento del total de la basura no es reciclable (ni para la reventa como vidrios, metales o cartones, ni para elaborar compost, como son los restos de comida). Ese porcentaje debería tener destino de enterramiento y en el municipio de Almafuerte están pensando en enviarlo diariamente o cada dos días a los sistemas que operan en Córdoba o Río Cuarto.
Mientras, no se descarta en Almafuerte que el sitio de “transferencia” hacia uno u otro destino sea el predio del ex matadero municipal.
Ese predio es el mismo que originó una fuerte y reciente polémica en Almafuerte cuando estuvo a punto de ser transformado en una playa de compactación y transferencia de residuos de esta ciudad y otros pueblos de la zona, en una obra que iba a financiar la Agencia Córdoba Ambiente, para derivar de allí diariamente la basura hacia los sistemas de enterramiento de Río Cuarto o Córdoba, o hacia algún otro que en el futuro pudiera crearse, a modo de vertedero controlado, en esta región. Ese proyecto de playa de transferencia quedó archivado, cuando ante la presión de instituciones locales que lo rechazaban, el municipio almafuertense le quitó el aval a la iniciativa provincial.
Ahora, aunque con otras características (y menos tecnología que la que preveía aquel proyecto) puede que el predio del ex matadero almafuertense sea usado como sitio desde el cual se derive la basura en parte hacia Los Cóndores y en parte hacia otras ciudades. La diferencia en todo caso será que por allí pasaría sólo los residuos locales y no los de otras localidades, que era uno de los puntos resistidos en la polémica reciente.

En Los Cóndores
En Los Cóndores, el municipio hizo un contrato meses atrás con una firma que en su basural empezó a reciclar los residuos (que no vienen separados desde los domicilios). Por ahora la tarea es más bien artesanal que con el uso de tecnología. Allí la firma separa los residuos reciclables, para su venta a terceros, y con los orgánicos elabora compost (para usar como mejorador de tierra, también comercializable). Alrededor del 30 por ciento de la basura que llega queda sin tratamiento posible y se procede a su enterramiento.
Quedaría por verse la capacidad de tratamiento que esa empresa tendrá en el predio de Los Cóndores y además la opinión de la Agencia Córdoba Ambiente sobre el mecanismo utilizado, más aún si es ampliado para transformarse ya en un sitio de tratamiento regional de basura.